Ayer tuvimos la oportunidad de visitar la iglesia de San Miguel y hacer una clase de religión diferente. Pudimos subir al púlpito, entrar y ver una puerta que da acceso directo al cine desde dentro de la iglesia, llegamos al coro , tocamos una de las ventanas de alabastro, bajamos a la cripta,… Adán descubrió los racimos de cebollas del siglo XVI, Rocío y los demás quisieron hacerse una foto con el paso de su cofradía,..
Pero lo mejor fue el trozo de torta que nos comimos al salir, de camino al colegio.